Durante la eclosión de la escalada deportiva a finales de los años ochenta y principios de los noventa, la garganta de El Verdón era el destino obligado para los escaladores de todo el mundo, que iban a medirse con sus líneas de referencia, aún hoy grandes clásicas.
Entre sus escaladas históricas encontramos vías como «Fenrir» (el primer 7a+ del mundo, por Patrick Berhault en 1977), «Pichenibule» (liberada por Patrick Berhault in 1980, con la que Catherine Destivelle firmó el tercer 7c+ femenino del mundo, en 1985), «Polpot» (7c+, que un joven Jerry Moffatt hizo a vista en el 84 y Alain Robert escaló en solo integral en 1996)…
También ultra clásicas aún hoy muy frecuentadas, nombres cargados de historia como La Demande, Las dalles grises, Luna Bong, Eperon Sublime…
Más de 50 años después de las primeras escaladas sobre su perfecta caliza de gota de agua, el Verdón mantiene su magnetismo y aún presenta retos pendientes, como esta línea que escala el noruego Magnus Midtboe, de hace ya dos años.
📸 Foto del gran Jan Vincent Kleine .