Posiblemente, en tiempos lejanos, el ser humano dio sus primeros pasos como escalador en su búsqueda de alimento y refugio, en un mundo donde la supervivencia era lo único de lo que preocuparse.
La escalada en roca tal y como la conocemos hoy en día, supone inexorablemente una evolución del montañismo, una búsqueda de la dificultad. Desde entonces el montañismo y la escalada en particular han estado en constante evolución por intereses en torno a las montañas, ya sea por el científico, el geográfico, incluso el político. Se buscaba en la conquista de las más altas cumbres el reconocimiento personal, algo que aun está presente en nuestros días.
Este vídeo de época nos lleva a años 30, que se caracterizan por sus trazados verticales y directos en importantes paredes, donde se combina la escalada en libre difícil y expuesta, con tramos de artificial.