Si se te cae un mosquetón al suelo o contra una piedra o repisa pueden aparecer microfisuras internas. Hay que desecharlo siempre.
SÍ, PORQUE:
- Cualquier golpe brusco contra una superficie dura en una parte crítica de una pieza metálica, puede llegar a debilitarla.
- Los mayores expertos en material del mundo (los ingenieros que diseñan el material) advierten en todas las instrucciones del material homologado CE que se retire de inmediato cualquier pieza metálica golpeada, ya sea tanto por caída libre como por choque pendular.
- La única forma de asegurarse de que una pieza no está seriamente dañado es realizar una costosa prueba de tracción en laboratorio, conocido como test destructivo, que rompe la pieza y que sólo aporta información válida para esa unidad, no generalizable a todo el material duro que sea golpeado.
NO, PORQUE:
- Los test realizados por los fabricantes no han demostrado de forma concluyente que cualquier mosquetón que se haya caído el suelo sea peligroso. Y es más: varios especialistas en metalurgia afirman que cualquier microfisura provocada por un golpe sería siempre visible desde el exterior, nunca sería sólo “interna”.
- Las microfisuras en las aleaciones utilizadas para el material duro suelen aparecer por otras causas: trabajo repetitivo o fatiga en posiciones inadecuadas, fallos de diseño o del tratamiento térmico, errores en el montaje de las diferentes piezas, controles de calidad insuficientes o inadecuados…
LO RAZONABLE:
Retira siempre el material de seguridad que haya sufrido una caída contra la roca, por ejemplo un mosquetón o un freno automático cuyo eje haya sido golpeado.
En principio esta recomendación te llevará a menudo a eliminar unidades que aún resultan seguras, pero por prevención y “paz mental” (como dicen alguna firmas norteamericanas) no te queda más remedio. Si no presentan graves deformaciones y el golpe no ha limitado su correcto uso o funcionamiento, empotradores y friends están más a salvo de esta última recomendación.