«El nombre que le he puesto a la vía, ‘Lily’s eye’ (el ojo de Lily), es un tributo a mi abuela; ella siempre vigilará a nuestra familia» cuenta Seb Bouin sobre la ruta que ha abierto y encadenado recientemente en Datça, Turquía, «un mega desplome de 80 metros con chorreras que acaba en pequeñas pinzas».
Asegura que ha sido una gran experiencia y mucho esfuerzo de equipamiento y limpieza al ser una línea tan desplomada y larga, con mucha chorrera. Sobre el grado, aunque él estaba buscando algún buen 9b, cuenta que la ruta finalmente rondará el 8c+.
«Es difícil saber el grado cuando estás equipando», cuenta Seb, «pero en todo caso para mí no es lo importante. Es una de las mejores vías que he equipado en mi vida y he pasado súper buenos momentos aquí escalando y compartiendo experiencias con mi madre» (quien le acompañó en este viaje). La línea está en el nuevo sector Cyclop, del que asegura tiene un gran potencial. Foto de Sam BIÉ Photography