«Al principio te hundes en un océano de oscuridad y piensas que nunca serás capaz de volver a estar tan fuerte como antes. Pero la clave está en mirar todos los pequeños puntos positivos y hacerlos más y más grandes cada día. Cada paso es pequeño, pero si confías en ellos, saldrás nuevamente del estado de ánimo negativo que genera tener una lesión. Y esto es también una buena filosofía para la vida en general, claro que no siempre es fácil de aplicar», nos cuenta Niccolò Ceria, fuerte bloquero italiano que salió, pasito a pasito, de una importante lesión de hombro.
En la foto, realizando un ejercicio con anillas en su «gimnasio» casero (fabricado por él mismo en un antiguo granero), por Marco Zanone Outdoor Filmmaker